Por Tomás Kunz (@TomasKunz_)

Cuando River más lo necesitaba y el partido menos lo demostraba, Sebastián Boselli, sin querer, logró destrabar el partido con un gol de cara. La defensa rival intentó despejar con un bombazo, pero la presión del uruguayo generó que la pelota no salga del área chica, a tal punto que terminó rebotando con tanta potencia en su mandíbula que se incrustó en el arco de Deportivo Táchira.

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Luego del partido, el propio autor del primer gol, dio sus sensaciones sobre la victoria y su debut goleador de manera profesional: Es hermoso. Algo que no se puede describir. Todos sueñan con jugar Libertadores, con ganar el partido y hacer un gol… es todo un sueño”. Además, el defensor uruguayo dijo, entre risas, con qué parte de su cara hizo el gol: “No sé, ni idea, suerte que entró ja ja ja. Ya está, a festejar. Creo que con la mandíbula, me duele ahí así que imagino que con la mandíbula, pero fue gol así que contento”.

Pero este miércoles por la tarde-noche, Pablo Boselli, padre y representante de Sebastián, confesó que “le movieron toda la mandíbula”. Además, en su diálogo con Sport890, confesó cómo vivió el primer gol de su hijo en River y en los problemas que este golpazo le dejó al defensor: “Sebastián no podía ni comer hoy”. Esto ya se había dado a conocer cuando, luego del gol y el posterior festejo, Boselli le dijo a González Pirez "me mato“, junto a ciertos gestos de dolor en dicha zona.