Hace rato decimos casi todos los que estamos en el Mundo River que el día a día de Marcelo Gallardo en el club siempre le ha dado más alegrías en el orden internacional que en el local.

No es opinión, simples datos así lo confirman. Pero partidos como el que se le ganó a Lanús dejan abierta la chance de que todo crezca y pueda cambiar por más que el equipo esté a 8 puntos de la cima.

River jugó un gran partido. No merecía estar debajo en el marcador como lo estuvo. Y después del choque ante Unión, la seguidilla de buenos juegos frente al DIM y a Lanús sienta bien.

Está claro que la punta está muy lejos, pero faltan muchas fechas.

River debe sumar y no parar de sumar y así meter presión por su simple triunfo. Ahí más de uno se va a asustar. Se viene Belgrano, que es más parecido a Unión que a los rivales a los que se les ganó claramente en estos últimos partidos. Habrá que empezar a dilucidar cómo jugarles y ganarles a ese tipo de rivales que se te meten atrás para así hacer la diferencia que meta miedo.

Gran partido de Pity Martinez, siempre lo castigué y quiero resaltarlo. Quizás ahí por derecha se acomode mejor. Ojalá. Y a Maidana y a Ponzio no los guarden nunca. Que se entrenen y estén siempre cuidados y en perfecto orden para así marcar por su presencia y estirpe la diferencia de carácter que tiene este equipo con ellos en cancha.

La Libertadores es anual y se puede no guardar tanto porque no se juega tan seguido y eso alimenta la esperanza, por más que hoy todo parezca lejano.