Cinco de los últimos siete goles que recibió River entre Libertadores y Copa Argentina, fueron de pelota parada. Una debilidad que preocupa.

La mala producción del equipo esta noche en Bolivia, tiene un punto en común con los últimos partidos: los goles recibidos después de una pelota parada en contra. Cinco de los últimos siete, entre local e internacional, llegaron por esta vía.

El primer gol de Jorge Wilstermann y el gol de Banfield, en el Monumental, son los ejemplos más claros de un problema que está comprometiendo al Millonario más de lo esperado.