Que este año termine ya
River volvió a perder: esta vez 1-0 contra Independiente en Avellaneda con gol de… ¡¡Nico Domingo!! Encima, Lux se fue expulsado a los 19’ del primer tiempo por un blooper insólito. ¡2017, andate ya!
Todavía quedan algunos partidos por delante, pero todo el mundo River quiere que este año termine ya. A los golpazos recibidos en los últimos días se suma una nueva derrota, esta vez 1-0 contra Independiente en Avellaneda, en un partido empapado de polémicas y curiosidades.
El primer factor de la caída fue, otra vez, Germán Lux: el arquero se fue expulsado a los 19 minutos del primer tiempo tras agarrar insólitamente la pelota con la mano fuera del área. Así, de manera irresponsable, dejó al equipo con 10 muy temprano y debió ingresar Bologna, un año después de atajar por última vez en Primera.
Increíblemente, lo mejor del equipo de Gallardo se vio a partir de ese momento: comenzó a dominar y tuvo algunas llegadas. Es más, en el segundo tiempo el Pity Martínez reventó el travesaño local y pudo haber abierto el marcador.
El arbitraje volvió a pesar, cuando Trucco decidió no amonestar a Amorebieta (ya tenía amarilla) cuando el vasco buscó convertir un gol con la mano dentro del área riverplatense. El juez vio la jugada pero, ante la queja de todo el equipo y el banco de suplentes Millonario, ignoró lo que hubiera sido dejar a ambos equipos con 10.
Luego, lo impensado: en el mejor momento de River en la segunda mitad, un tiro libre que casi termina en gol de Maidana finalizó con Rojas no corriendo a Sánchez Miño, que desbordó por la izquierda y tocó atrás para que apareciera quién sino Nicolás Domingo.
“Un gol a River jamás lo podría gritar”, comentó tras el triunfo de Independiente el volante central que transitó toda su juventud en Nuñez.
El Millonario volvió a perder, algo a lo que lamentablemente se está acostumbrando, y quedará sobrevivir, como pueda, el resto del campeonato, del que ya está a 12 puntos de Boca y con un partido más en su haber.
La Copa Argentina será el único reto que queda hasta el 2018, donde deberán barajar y dar de nuevo, buscando armar un plantel que, ahora sí, esté a la altura de lo que se juega.