Una versión renovada de Domínguez
De una actuación muy buena en San Salvador de Jujuy a un papel demasiado malo en el Monumental, sin escalas. Así fue el rendimiento de Alejandro Domínguez en un lapso de ocho días, pero ayer mostró un nivel sumamente alentador, debido a que compartió la ofensiva con Fernando Cavenaghi y participó en tres de los cuatro goles.
En la apertura del marcador, el atacante de 30 años recibió una falta de Hernán Zanni y aprovechó el tiro libre desde el sector izquierdo para que su centro fuera venenoso y hallara la cabeza de Lucas Ocampos, cerca del primer palo. De esa manera, River consiguió la ventaja frente a Guillermo Brown y se marchó en paz al descanso.
Tan sólo iban 22 segundos del complemento cuando el Chori quedó mano a mano con Sebastián Pereyra y definió de zurda para ampliar la diferencia. En consecuencia, River liquidó la historia en ese momento y enseguida el Torito hizo el tercero, con el oportunismo necesario para justamente capturar el rebote que el arquero dio tras el remate de Domínguez.
A los 31 minutos del complemento, Andrés Ríos reemplazó al Chori, quien fue ovacionado y recibió una muestra de cariño más, en una tarde en la que fue muy solicitado por los hinchas de unos y otros. Sin embargo, la principal virtud para destacar es que el delantero surgido de Quilmes funciona mejor en su posición natural, por velocidad, condiciones técnicas y la posibilidad inmejorable de eludir a un defensor y definir.
Por Germán Balcarce
Imagen: Wally