"Hace años que tenemos el pasto así". Oscar, de unos 40 años, es el canchero de Guillermo Brown y tiene su corazón dividido entre el dueño de casa y el rival eterno de River, pero invitó amablemente a Pasión Monumental para que pudiera comprobar el buen estado del pasto en el Estadio Raúl Conti.

Tan sólo 101 metros de largo por 68 de ancho son las medidas. Las líneas de cal ni siquiera estaban pintadas ayer porque que el encargado de mantener en condiciones al césped tiene como cábala hacerlo en las últimas horas. "Algunos técnicos me pedían que pintara las líneas más cerca de los bancos, pero por ahora Dalcio Giovagnoli no me dijo nada", explicó Oscar.

Lo cierto es que el pasto se encuentra corto y muy bien cuidado. Siete  riegos se ocuparon de abastecerlo durante buena parte del viernes para que conservara su calidad, entonces Matías Almeyda no deberá preocuparse cuando sus dirigidos salgan por el túnel para que River pueda los tres puntos en su histórica visita a Puerto Madryn.

Por Germán Balcarce