Ramón cambió la cara. Desde aquel final desprolijo de 2012, con la salida de Almeyda yéndose por la ventana y él, el riojano, apareciendo como el mesías. Es incomprobable saber, al menos hasta junio, si con el Pelado volverán los éxitos. Si River va a salir campeón. Pero hay un cambio, un intentar volver a ser. Así lo siente la gente y también los jugadores. En el primer encuentro del año, el equipo alternativo le ganó 2 a 0 a Independiente. Y todos, algunos con más nivel pero todos con un nivel aceptable, le demostraron al técnico que van a pelear un lugar. Bienvenido sea para River.

En épocas de piernas duras por las pretemporadas que recién arrancan, los de Ramón estuvieron más ágiles. De piernas y de cabeza, sobre todo la de Rogelio Funes Mori, que apareció dos veces para abrir y cerrar un partido que fue más sencillo de lo imaginado. Porque los del Tolo, que no fue a Mardel, estuvieron lejos de pelear el encuentro.

Seguramente Ramón se habrá llevado buenas impresiones de su primera cita en 2013. El rendimiento en general fue bueno y desde lo colectivo no existieron fisuras. En el aspecto individual, Funes Mori, Tomás Martínez y Acevedo fueron de lo mejorcito.

Ahora vendrá Boca, pero lo más importante es el 10 de febrero, cuando se estrene por el certamen doméstico. Igual, los partidos de verano le servirán al técnico para definir los once. Se sabe: los que le ganaron al Rojo no serán los titulares, pero hicieron méritos, metieron presión para estar. Y el arranque ilusiona. Mucho.

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