Triunfo agónico de River ante Atlético Tucumán: ¿Cómo quedó en la tabla de posiciones?
Por Nicolás Bozonchuk (@nicobozonn).
Capitulo número 5 para River en esta Copa de la Liga. En casa por segunda vez consecutiva, ante Atlético Tucumán, elenco que llegó al Monumental invicto con tres empates y un triunfo. Hablando estrictamente sobre el Millonario, Martín Demichelis tomó la decisión de repetir el once que triunfó ante Arsenal el domingo pasado. El esquema elegido por el técnico fue el 4-2-3-1, y salió con: Franco Armani; Santiago Simón, Paulo Díaz, Ramiro Funes Mori, Milton Casco; Enzo Pérez, Nicolás De La Cruz, Ignacio Fernández, Manuel Lanzini, Esequiel Barco; y Miguel Borja como única referencia de ataque.
River arrancó el partido con muchísima intensidad, queriendo romper a toda costa el muro defensivo que plantó Atlético en los primeros minutos. A puro toque y espera, de esa manera se encontraban los huecos para lastimar al rival. La primera jugada clara llegó a los 10 minutos en los pies de Miguel Borja, quien definió a las manos del arquero tras un gran pase de Nacho Fernández. Sin embargo, el "Decano" no se achicó en ataque, sabiendo lo endeble que es el Más Grande defensivamente, y cuando pudo peligró y bastante el área de Franco Armani. De hecho, el mismo "Pulpo" salvó al Millonario de un casi gol olímpico, el cual logró manotear a tiempo. Minutos después, Nico De La Cruz encaró por la banda izquierda y tiró un gran centro a la cabeza de Nacho, el cual finalizó en las manos de Marchiori. Como si fuera poco, River tuvo otra chance de cabeza, esta vez con Ramiro Funes Mori, que llegó justo al centro de Nacho y por centímetros no logró estampar el 1-0. El Millonario estaba enchufado y merecía ponerse en ventaja. Uno de los antagonistas de esta historia fue Tomás Marchiori, quien se encargó de salvar a su equipo en reiteradas ocasiones. La más clara de ellas fue un remate furioso de De La Cruz luego de un espectacular recorte de Barco, pero el arquero voló y ahogó el grito. Cabe destacar que sobre el final de los primeros 45 minutos, Dóvalo fue al VAR y anuló de manera errónea y sin criterio un gol de Paulo Díaz que era valido desde cualquier perspectiva.
Perseverancia es la palabra que define el triunfo de esta noche. No quería entrar de ninguna manera, y sobre el final Rondón le dio la alegría al hincha Millonario. La tapa de todos los diarios, estirando el récord de local y metiendo a River en la zona de clasificación.