Cada vez que el equipo se muda, hay un dolor de cabeza para los socios. No solo por lo que implica a nivel de costumbres y cantidad de ubicaciones sino también por la organización de los canjes y el estrés que genera conseguir una entrada a través de Internet, con la incertidumbre hasta último momento.

De todas formas, esta vez el dinero por la realización del Quilmes Rock (3, 4 y 7 de abril) no traerá efectos secundarios. "Vamos a jugar en el Monumental, se utilizan distintos escenarios y las funciones comienzan tres días después de que recibamos a Ferro", le explicó un directivo a Pasión Monumental.

En consecuencia, el conjunto que dirige Matías Almeyda podrá regresar a casa para enfrentarse con el club de Caballito, en uno de los encuentros correspondientes a la vigésimo séptima fecha de la B Nacional. ¿Cuándo? Seguramente, el sábado 31 de marzo.

Por Germán Balcarce

Imagen: Pasión Monumental