Se lo llevó puesto
River dio una muestra de actitud ante la adversidad y con los cambios de Gallardo se levantó un partido más que difícil para meterse en semifinales de la Copa Libertadores.
La criticada frase de la actitud que tiene River quedó en el pasado después de que, en cancha, se demostrara que no era una chicana. Con el impulso de la victoria en el Superclásico, el equipo siguió demostrando y se repuso de un primer tiempo similar al partido que se jugó en Avellaneda.
Gallardo tuvo el timing para hacer los cambios que pedía el partido y las soluciones llegaron desde el banco cuando Romero puso el empate después de que Nacho Scocco abriera la cuenta con una contra que armó con Borré.
El fútbol que hacía falta llegó con el ingreso de Juanfer, que puso el 2-1 con toda la calidad que derrocha y el propio Borré le bajó la persiana al partido con un golazo que fue una recompensa para todo el sacrificio que sabe mostrar.
El partido de Ajedréz que había planteado Holan se terminó cuando el estratega que tiene el Millonario en el banco supo mover las piezas para poner al Millonario una vez más en la semi de la Copa que obsesiona a todos.
Se aguantó cuando fue necesario y literalmente se lo llevó puesto cuando el Rojo bajó la guardia. Ahora queda esperar por el rival y seguir soñando, algo que el grupo permite y le regala a la gente partido a partido.