Noche victoriosa de River ante Nacional por la Copa Libertadores
Por Nicolás Bozonchuk (@nicobozonn).
Por fin llegó la primera noche de Copa Libertadores en casa, en el Mâs Monumental frente a Nacional de Uruguay por la fecha 3 del Grupo H. Noche clave para River teniendo en cuenta la chance de poder sumar un puntaje perfecto antes de la seguidilla de visitante que se viene. Es por eso que hoy Martín Demichelis optó por un once sumamente ofensivo, tal vez el indicado incluso. Con un esquema 4-2-3-1, el Millonario salió con: Franco Armani; Andrés Herrera, Leandro González Pirez, Paulo Díaz, Enzo Díaz; Rodrigo Villagra, Rodrigo Aliendro; Pablo Solari, Nacho Fernández, Claudio Echeverri; y Miguel Borja como único nueve.
El partido comenzó con bastantes roces entre los jugadores de River y los de Nacional, algo que anticipaba en cierto punto el picor con el que se iba a vivir hasta el final. Con el aliento de la gente, el Millonario se adueñó de la pelota, pero le costaba penetrar el área rival. Empujando desde el fondo, Pablo Solari casi logra abrir el marcador a los seis minutos después de una excelente habilitación de Leandro González Pirez, pero el arquero Mejía salvó a los uruguayos de la catástrofe. Apenas unos minutos después, Rodrigo Aliendro tuvo la suya después de un rebote que llegó de un córner, pero el golero volvió a ponerse firme ante la oportunidad Riverplatense. La tercera iba a ser la vencida, pero en este caso con Claudio Echeverri, el eje de los ataques, quien tomó el balón y sacó un derechazo letal para estampar el 1-0 en la noche copera. Golazo y picardía máxima del pibe nacido en las inferiores del club convirtiendo su primer gol en materia internacional.
La intensidad no bajó nunca, River estaba decidido a seguir ampliando el marcador de la forma que sea. El segundo estuvo al caer desde un tiro libre en pies de Nacho Fernández, pero Mejía le atragantó el grito de gol después de una atajada poco usual con las rodillas. Pasando los treinta minutos de juego, el equipo de Martín Demichelis seguía siendo el protagonista del partido pero un tanto endeble en el fondo. Sin embargo, el "Bolso" asustaba de a ráfagas, una de ellas con Carneiro, quien probó de media vuelta sin suerte ante las manos salvadoras de Franco Armani.
Con el pasar del partido, la visita comenzó a arrimarse cada vez más al arco de Armani. Por eso, Micho volvió a mover el banco con los ingresos de Manuel Lanzini y Santiago Simón en lugar de Echeverri y Aliendro. Al instante, Colidio pudo haber marcado el 2-0 con una volea en el borde del área chica, pero el arquero de ellos volvió a responder de buena manera. Con las variantes, el Millonario probó varias veces desde lejos con el objetivo de clavar el 2-0 que se hacía desear. Cinco minutos antes del cierre, Villagra salió del once para que ingrese Matías Kranevitter, agotando la totalidad de variantes. Sobre el final, Barco quedó mano a mano con el arquero y decidió cerrarse un poco para ensayar un centro al segundo palo dirigido a Colidio, que apareció solo para ganar en las alturas y liquidar la historia con un cabezazo letal.