Luego de la disposición de la Conmebol para que la Copa Libertadores vuelva en septiembre, el Millonario es el único equipo de su grupo que todavía no retornó a los entrenamientos. Una clara desventaja que afecta en Núñez y al resto de los equipos argentinos.

La decisión tomada por el ente parecería no tener vuelta atrás. Los rivales con los que jugará el equipo del Muñeco ya se encuentran entrenado y hasta tienen fecha de vuelta para su torneo local. Mientras que desde AFA todavía no hay un protocolo claro para la vuelta a los entrenamientos.

Dentro de dos meses River tendrá que jugar ante San Pablo como visitante. El conjunto brasilero se encuentra totalmente aislado, en un predio de alto nivel, donde lleva a cabo las tareas físicas y futbolísticas. El lugar cuenta con una cancha de fútbol por lo que el técnico ya dispuso de un equipo que podría aparecer el 22 de julio cuando se reanude el torneo paulista.

El equipo que probablemente tenga mayor ventaja es Liga de Quito. Se encuentran entrenando hace más de un mes y su técnico, Pablo Repetto, reconoció la ventaja que tendrían ante River si jugasen dentro de poco. Además el entrenador uruguayo está presionando en la federación ecuatoriana para comenzar a disputar partidos amistosos de preparación para el torneo que retomaría a finales del mes de julio.

Por último Binacional comenzó con los entrenamientos la semana pasada. Sin embargo, el conjunto peruano tiene a cuatro jugadores totalmente aislados luego de dar positivos en el testeo previo a la vuelta. El torneo local para ellos comenzará el 7 de agosto con la particularidad que solo se disputará en Lima, por lo que Bi tendrá que dejar los 3824 metros de altura. Igualmente desde la dirigencia harán fuerza para mantener la localía en la Libertadores.

Por el momento River lidera el grupo con diferencia de gol luego de vencer 8 a 0 al conjunto peruano, en lo que fue el último partido del equipo hasta el parate. Si bien el plantel se sigue entrenando a la distancia, la gran preocupación que tiene Gallardo en su cabeza sería como lograr que el plantel llegue de la mejor manera al partido ante San Pablo sin haber jugado un partido, hasta el momento, por 123 días.