Si hubo situaciones que marcaron el ciclo de Gallardo fueron algunas de sus frases icónicas sobre diferentes momentos que atravesaba el equipo.

Marcelo Gallardo se convirtió en el técnico más ganador de la historia de River y en estos siete años tuvo varios momentos que lo marcaron. El técnico explicó los motivos por los que digo dos frases que se transformaron en icónicas en su ciclo.

"El resentimiento está todo el tiempo con nosotros y convivimos con eso. No solo en el fútbol, en la vida. No se piensa ´che que bien que le va, ¿qué esfuerzo habrá hecho?´ siempre se mira de reojo. La cultura de juzgar al otro y no mirarnos a nosotros. Una vez dije hay que estar con la guardia alta, soy de Merlo y eso significa estar atento, mirar para todos lados, estar alerta en la vida, no podés caminar mirando para abajo porque pasan un montón de cosas. Hay que estar alerta en la vida. Yo lo transmití en una guardia lata siempre, no porque esperas que te pase algo porque hay que estarlo, no vivimos en un país donde funciona todo perfectamente. Hay que tener compromiso, voluntad, no claudicar, eso es lo que me criaron a mí", comenzó Gallardo.

Y recordó sobre cómo se lo tomaron algunos sectores: "En seguida me metieron ahí, a especular a quien se lo había dicho. Lo había dicho para lo nuestros primero que nada, porque cuando funciona te esforzás menos, crees que lo resuelven por vos y tenes tendencia a relajar. Vos no te podés relajar, nuestra estructura funciona como equipo y yo necesito que todos los que estamos involucrados en la estructura estén con el deseo de seguir empujando, que esten despiertos, alerta. Cuando empezás a bajar, también se puede generar un efecto contagio negativamente, cuando son varios los que piensan que van a traccionar por vos es donde hay que volver a estar alerta. Por eso es lo que hablo primero para adentro y después estar alerta sobre el afuera".

En un extenso mano a mano con TyC Sports agregó: "Yo a la crítica le doy la importancia justa y necesaria que hay que tener en todo. Me parece que tiene que ver un poco como lo que hablábamos recién de las opiniones diferentes. Si argumentamos, podemos debatir y que eso nos lleve a enriquecernos, es genial. Con la crítica me pasa lo mismo, la crítica puede ser porque no te conoce pero no le gustas como persona, porque no generas empatía por un gesto, entonces está la crítica de ese lado muy fría y aislada. Después está la que se argumenta. Si vos decís ´no me gusta, porque no me gusta´, esa yo no la respeto, no le doy importancia. Si se lo doy a la argumentada, me interesa escucharla, leerla, ya sea mala o buena. Me interesa porque me abre los ojos. Después bueno está la malintencionada que viene de algún lado que busca desestabilizar, a esa ni la tomo en serio".

En el tercer aniversario de la Copa Eterna, el Muñeco tomó el micrófono e invitó a los hinchas a hacer un ejercicio donde pensar que hubiera pasado sobre si River perdía la final para luego remarcar el triunfo en Madrid. Muchas personas se tomaron esa situación como una chicana al eterno rival.

Ante esta situación, confesó: "Vos no le podés contestar a todo el mundo, hay gente que está esperando para atacarte. Yo lo que quise es transmitir lo que nosotros ganamos, que es un tesoro y lo es para toda la vida. No había existido en la historia, quería que los hinchas de River vivan ese momento, que lo disfruten. Si los demás quieren atacarme problema de ellos si lo hacen, tuve miles de oportunidades para hacerlo, se nota que no me conocen".