Gallardo: sus comienzos, la final en Mendoza y su deseo para River
En un imperdible mano a mano, Marcelo Gallardo recordó gran parte de situaciones que le tocó vivir en sus seis años como entrenador de River.
Gallardo estuvo a corazón abierto recordando sus sensaciones como técnico de River, aprovechó para acordarse de su mamá y su faceta de futbolista, la importancia de la estructura del club y se deseo para el futuro.
En una charla con el periodista Costa Febre, para recordar el segundo aniversario de la obtención de la Libertadores de 2018 ante Boca, la charla, en algunos momentos, fue abriendo otros hilos de conversación.
"En mis primeros cuatro meses me pude dar cuenta que había buena energía para dar un paso más. Además, la confianza de los jugadores que de entrada tuvieron una predisposición fantástica para trabajar, de Enzo, del presidente y sus directivos, ahí está el punto", comenzó Gallardo cuando recordó sus comienzos como técnico de River.
En cuanto a los jugadores, llenó de elogio a Ponzio y Maidana: "Son símbolos de este proceso. Jonatan no está más, fue ese caudillo silencioso que tenía sus problemas físicos y quería estar en todos los entrenamientos, me veía muy reflejado, y después fue muy importante en nuestra estructura defensiva. Y Leo era un jugador que estaba olvidado y vimos en él un León herido que estaba desalineado, cuando llegué le dije que le iba a dar esa oportunidad para ponerse en carrera, lo único que le dije ´ponete bien´. Con el correr del tiempo se ha convertido en el símbolo que acompaño este proceso."
"Mis hijos son lo más importante que me dio la vida, es el trofeo máximo cada uno de ellos. Trato de ser un buen padre cada día, ser amigo de ellos y estar presentes en todo momento", dijo con una sonrisa en los ojos y luego con emoción cuando habló de su mamá: "Hablar de mi vieja en público me cuesta, siempre que la mencionan me viene. Mi vieja me acompañó hasta el día que murió, ella ya estaba muy enferma y estábamos viviendo la Sudamericana. Quería ir a la cancha y esperarme en la puerta del vestuario solamente para saludarme."
Un momento de quiebre de su ciclo fue en la derrota con Lanús en 2017 y la posterior victoria en Mendoza contra Boca: "En Mendoza se jugaban muchas cosas, nosotros no veníamos bien, habíamos sufrido un duro golpe con Lanús en 2017. Se hablaba de final de ciclo, en esa oportunidad fue la más fuerte, querían hacer creer que se terminaba todo y eso me dio muchísimo empuje."
"Me gustaría que River institución se sostenga con todo lo que se logró en estos años. Más allá de las personas porque todas las personas estamos de paso, que quede la estructura firme, ese es mi deseo", dijo Gallardo.