Por Nicolás Bozonchuk (@nicobozonn).

River igualó 2-2 ante Nacional en su visita al Gran Parque Central, en el marco de la fecha cuatro de la Copa Libertadores de América. En un partido en donde se inició ganando con los goles de Miguel Borja y Facundo Colidio, el Millonario terminó sufriendo el empate en la segunda parte gracias al penoso y tristísimo arbitraje del brasileño Anderson Daronco.

Todo comenzó con cortes bruscos y peligrosos por parte del “Bolso”, pero el detonante se dio en la segunda parte, cuando el futbolista Lozano fue con plancha hacia Rodrigo Aliendro, provocando un descontrol de empujones entre ambos elencos.

Players of Nacional and River Plate fight during the Copa Libertadores group stage second leg football match between Uruguay's Nacional and Argentina's River Plate at the Gran Parque Central stadium in Montevideo on May 7, 2024. (Photo by DANTE FERNANDEZ / AFP) (Photo by DANTE FERNANDEZ/AFP via Getty Images)

En medio del ‘tole tole’, Franco Romero se pasó de la raya y le metió una piña en la cara a Paulo Díaz digna de tarjeta roja allá y en todos los escenarios posibles. Sin embargo, el árbitro de 43 años decidió apenas amonestar al futbolista uruguayo, aun viendo la situación más de siete veces en el VAR en donde se vio clarísima la agresión hacia el defensor chileno.

Esta mañana, Conmebol publicó los audios del diálogo entre los encargados de la revisión y el colegiado principal del encuentro sobre las dos polémicas de la noche. Daronco repasó ambas acciones por varios minutos, e insolitamente terminó ratificando su decisión de mantener la tarjeta amarilla y no expulsar, algo que había quedado clarísimo en la repetición.

La justificación de la piña: "No me cierra para tarjeta roja". Insólito por donde se lo vea, ya que Wagner Reway le marcó en reiteradas ocasiones que era para expulsión. Pero eso no es todo, porque todo se originó en la patada Aliendro.

"Él tuerce las piernas. El torso tuerce el tobillo del jugador e inicia todo el conflicto de la discusión, empujones y peleas", marcó el VAR sobre la infracción al ex Colón. Como se vio en todo el mundo, el árbitro decidió mantener la amarilla.

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