Luego de la victoria frente a Boca por la final de la Supercopa Argentina, el conjunto Millonario sumó una gran cantidad de puntos entre partidos de Superliga y Copa Libertadores.

Ezequiel Pirotti @tanopir

Cuando se acercaba el 14 de marzo y River parecía abatido -desde lo futbolístico y lo anímico- una victoria Superclásica lo hizo resurgir a pasos agigantados. El equipo Millonario llegaba en condiciones desfavorables a la final de la Supercopa frente a Boca, ya que en la Superliga no lograba sumar de a tres y cualquier equipo sabía cómo complicarlo. Los jugadores no mostraban reacción. Pero el día en el que hubo que levantarse, el Más Grande golpeó: venció al Xeneize y se consagró campeón. De allí en adelante, todo ha sido sonrisas en Núñez.

Tras derrotar al eterno rival, River sumó 13 puntos de 15, contando los partidos de Superliga y de Copa Libertadores. Por el torneo local, venció a Belgrano y a Defensa y Justicia (ambos por 3 a 1), y a Racing y a Rosario Central (2 a 0).  Por el certamen internacional, obtuvo un punto producto del empate sin goles frente a Independiente Santa Fe, por la segunda jornada de su grupo. Como yapa, también salió victorioso (3 a 0) en el amistoso por fecha FIFA que disputó, con mayoría de suplentes, frente a U de Chile.

Un resultado, el 2 a 0 frente a Boca, fue el factor determinante para que el equipo de Marcelo Gallardo despierte. Mucho mejor desde lo mental, y aún intentando moldear una idea clara de juego, el Más Grande pretende seguir con la racha positiva de acá hasta mediados de mayo, mes donde sabrá si clasificará a los octavos de final de la actual Copa Libertadores y, también, si podrá acceder a la del año que viene o, bien, jugar la Copa Sudamericana.