Por Nicolás Bozonchuk (@nicobozonn).

Capitulo número 22 de la Liga Profesional de Fútbol, ni más ni menos que ante Barracas Central en el estadio Claudio "Chiqui" Tapia. Un duelo importante para llegar al miércoles ante Colón con la chance de ser campeones cuatro fechas antes. Para eso, River debió hacer lo suyo ante un rival que llegó con la mala racha de tres partidos al hilo sin conocer la victoria. Yendo estrictamente a lo táctico, Demichelis plantó un equipo totalmente alternativo, dándole la chance a aquellos que no suelen iniciar desde la partida. Además, le dio descanso a jugadores importantes como Esequiel Barco, Rodrigo Aliendro y Milton Casco, para que no sufran sobrecargas y lleguen a los tramites finales. Por lo tanto, con un esquema 5-3-2, el Millonario salió con: Franco Armani; Andrés Herrera, Robert Rojas, Jonatan Maidana, Enzo Díaz, Elías Gómez; Matías Kranevitter, Agustín Palavecino, José Paradela; Miguel Borja, y Salomón Rondón.

Ampliar contenido

River inició el duelo necesitando de los reflejos de Franco Armani, quien tapó con los pies un remate cruzado de Facundo Mater, posterior a una excelente jugada preparada desde el córner. Al Millonario le costaba con la pelota, no jugaba cómodo ante una intensa presión de Barracas. Se veía obligado a jugar con los dos laterales bien abiertos, y las dos referencias de ataque (Borja y Rondón), atentos a algún centro al área. Por parte de los locales, Barracas atacaba muy directo, con Sepúlveda, Calderara y Mater a la cabeza de cada aproximación. Tal fue así que Agustín Palavecino tuvo que cortar con falta a Sepúlveda, a centímetros del área otorgándole una falta letal. La jugada preparada de Rondina no falló. Tiró el centro Iván Tapia y Carlos Arce estampó de cabeza a los 18 minutos el primero del "Guapo" en el marcador ante la floja respuesta de la defensa. Si bien quedaba mucho tiempo para revertir el resultado, el equipo no estaba jugando bien y Barracas se le venía encima. Palavecino, Kranevitter y Paradela estaban completamente anulados, sin poder resolver correctamente y perdiendo casi todas las pelotas. Al no poder jugar por el medio, lo único que hacía River era tirar centros a la olla, de los cuales todos fueron descolgados por Desabato. La primera gran chance de empatar le quedó de rebote a Elías Gómez, que enganchó y remató de zurda a varios metros del arco rival. Sin sobresaltos ni mejoras en el juego (salvo un gol de Enzo Díaz anulado por offside), el Millonario se fue al entretiempo con muchísimas cosas por pulir para poder igualar en el marcador.

El equipo pasó de un 5-3-2 a un 4-4-2, con Palavecino bien pegado a Kranevitter en el medio y Solari y Paradela bien abiertos sobre las bandas. De contra ataque (post tiro libre a favor), Barracas agarró mal parado a River y tras dos centros, Tapia asistió a Peinipil que desde el suelo la encajó en un ángulo.
el Millonario respondió rápido. frente a la pelota apareció Borja, que se acomodó y sentenció el primero del Más Grande a 30 minutos del final. Palavecino probó de nuevo desde lejos con un puntazo que tocó la parte de afuera de la red. se enfrentó ante Armani, que se agigantó y salvó al Millonario del 3-1. No alcanzó con los cambios, y por más empuje y garra, el Millonario se fue del "Chiqui" Tapia con las manos vacías.
Durísima derrota, en el mejor momento futbolístico de la Era Demichelis. Algunos jugadores del equipo alternativo de hoy demostraron que no están a la altura