River perdió 3-1 contra Patronato de local y no levanta cabeza en un comienzo de 2019 que parece ser oscuro para el Millonario.

Otra vez perdimos. Otra vez de local. Y otra vez contra un equipo infinitamente menor. River cayó 3-1 contra Patronato en el Monumental, dejando una muy mala imagen a pesar del atenuante de jugar con casi todos suplentes.

El primer tiempo del equipo de Gallardo fue espantoso: una defensa que nunca se asentó, un debutante Rojas al que le costó mucho, un mediocampo que fue de tránsito por el juego directo que propuso la visita y un ataque inexistente.

Los dos goles de Ávalos le dieron el triunfo en esa primera parte a los de Paraná, ante un Millonario que casi no pateó al arco de Bértoli y en un Monumental que todavía sigue pensando en el triunfo pasado contra Boca.

Ya en la segunda mitad, otra vez el mismo futbolista le dio el 3-0 a Patronato, que podría haber aumentado el marcador si hubiera sido un poco más preciso. El pibe Ferreira apareció en escena para meter un golazo desde afuera del área y ponerle suspenso a la historia.

A partir de ahí, River mereció algún gol más. Lo convirtió a través de Borré, levemente adelantado, que pudo haber sido el descuento que terminara en empate.

Más allá del empujón final, el Millonario perdió sin atenuantes y acentúa su mal momento. Tras la caída contra Unión, Gallardo declaró estar dispuesto a perder los primeros 5 o 6 partidos del semestre porque, en el futuro, el equipo va a mejorar.

Ojalá que la levantada llegue antes. Porque, así, no se llega a ningún lado…