Por Nicolás Bozonchuk (@nicobozonn).

Un simple partido ante Sarmiento tendrá el tinte especial de ser el último de Martín Demichelis como entrenador de River. Después de algunos resultados disparejos y eliminaciones tempraneras, la dirigencia del Millonario determinó que hoy sea la función final de un entrenador de la casa, hincha y enamorado de la camiseta, pero que por A o por B se termina yendo de una manera dolorosa. En fin, el Más Grande recibió al "Verde" de Junín en casa, con las ganas de cerrar este ciclo de la mejor manera, con un triunfo en el Monumental repleto de hinchas ansiosos por una victoria en este certamen.

En cuanto al equipo, Demichelis optó por algunos cambios trascendentales, como la salida de Federico Gattoni, Felipe Peña Biafore y Facundo Colidio. Pasando en limpio, el Millonario salió con: Franco Armani; Milton Casco, Leandro González Pirez, Paulo Díaz, Enzo Díaz; Santiago Simón, Matías Kranevitter, Manuel Lanzini; Franco Mastantuono; Pablo Solari y Miguel Borja.

El encuentro no arrancó de la manera más atractiva, ya que River luchaba contra el muro defensivo habitual de Damonte y Sarmiento. Costaba y mucho romper líneas, ellos tapaban todos los huecos, cediendo por completo la tenencia de la pelota y apostar a algún contraataque. Las primeras ocasiones a favor llegaron pasando los diez minutos de juego, primero desde la pelota parada con un remate de Manuel Lanzini que se fue rosando el travesaño, y luego con una volea de Franco Mastantuono que también pasó cerca del arco de Acosta. A partir de ese momento, el Millonario encontró los huecos y empezó a presionar altísimo sobre los defensores rivales, complicándoles la salida y sometiéndolos en su propia área.

Llegando a la media hora de juego, Miguel Borja originó la más clara de la primera parte, quedando mano a mano pero perdiendo el duelo tras una muy buena atajada del arquero. River logró someter a su rival jugando de una manera muy agresiva e insistente, pero el gol fue la principal deuda de una primera parte plagada de ocasiones peligrosas.

De la mano de Mastantuono, River despidió a Demichelis con un triunfo frente a Sarmiento
Mastantuono Simón Lanzini el arquero rival se lució con una excelente reacción

River seguía llegando al área contraria, pero Acosta siguió agigantándose ante dos ocasiones de Mastantuono, el más ofensivo del equipo. Y a los 25 tuvo otra muy clara Miguel Borja, ensayando de media vuelta un remate venenoso que terminó despejando al córner el portero de Sarmiento. Siguiendo con los cambios, a los 30 minutos le tocó a Nacho Fernández y Nicolás Fonseca, en reemplazo de Lanzini y Kranevitter. La alegría se hizo desear y llegó a los 42 minutos gracias a la joya del plantel: Franco Mastantuono. El joven nacido en Azul tomó la pelota de un tiro libre muy bien ubicado y la colocó en el ángulo para hacer delirar a todo el Monumental y poner en llanto a Micho.

De la mano de Mastantuono, River despidió a Demichelis con un triunfo frente a Sarmiento

El cierre perfecto de un ciclo con altos y bajos, pero que al fin y al cabo fue conducido alguien que ama infinitamente a la institución. Nadie va a poner en duda el amor de Demichelis por la camiseta. River dominó pero el gol se hizo desear, por suerte llegó con ese zapatazo letal de Mastantuono que dejó atónitos a todos los presentes en el estadio.

De la mano de Mastantuono, River despidió a Demichelis con un triunfo frente a Sarmiento