El conjunto brasileño, que se mide ante River por Copa Libertadores, atraviesa una situación completa a nivel club. ¿De qué se trata?

Falta cada vez menos para que River y Cruzeiro se enfrenten por los octavos de final de la Copa Libertadores. El Millonario y el Celeste se miden el 23 de julio, en el Monumental, mientras que jugarán el encuentro de vuelta, el 30 del mismo mes, en Belo Horizonte. 

Pero a días del primer choque, el conjunto brasileño se ve envuelto en un escándalo: la división especializada en investigación de fraude de la Policía Civil de Belo Horizonte se hizo presente en el club y allanó las instalaciones y a dirigentes (el presidente, el vice y el director general), debido a irregularidades en la venta de un jugador de Inferiores.

El conjunto brasileño vendió un porcentaje de los derechos económicos de Messinho, juvenil de 11 años, hecho que está prohibido por la FIFA. Con el aval del organismo mundial, la Confederación Brasileña de Fútbol le descontará puntos, lo que hará que Cruzerio quede anteúltimo, en puesto de descenso, en la tabla del Brasileirao.

Mientras que en Nuñez se preparan para los duelos, en Belo Horizonte el foco está puesto en posibles sanciones luego de los últimos allanamientos.

¿Repercutirá a la hora de jugarse la serie copera?