La Conmebol realizó el protocolo habitual de sorpresa y le hizo exámenes a los dos planteles finalistas de la Copa Libertadores. 

Este sábado, desde las 17.30, River y Flamengo se verán las caras en la final de la Copa Libertadores. Los dos planteles ya se encuentran en Lima, Perú, donde se disputará el encuentro definitorio. 

En el hotel donde se hospedan los jugadores del Millonario hubo una sorpresa: Conmebol se hizo presente sin previo aviso para realizarle el control antidoping a los jugadores, protocolo habitual de la entidad.

Horas más tarde, el conjunto brasileño también fue testigo de la misma práctica a la espera de la gran final a jugarse en el estadio Universitario