En un partido cambiante, la Reserva de River cayó 3-2 contra Tigre, con goles de Rojas y el debutante López. Lux tuvo responsabilidad en el último y su nivel preocupa de cara a la Copa.

Era un partido de relleno, sin mucho en juego para River: Atlético Tucumán ya había perdido y la clasificación a la próxima Copa Libertadores era un hecho. Sin embargo, había que completar la Superliga contra Tigre, equipo que peleaba por no descender.

Y fue un partidazo: los visitantes le ganaron 3-2 al equipo del Muñeco, que puso mayoría de pibes y terminó el encuentro con un solo titular, que fue Martínez Quarta.

Rojas abrió el marcador para el Millonario, de cabeza, pero rápidamente Janson lo igualó para irse 1-1 al entretiempo. En la segunda mitad, el Matador fue por el triunfo de manera desesperada, acumulando delanteros y abriéndose en el fondo.

A falta de 10 minutos para el final, Morales clavó un golazo desde afuera del área para darle la ventaja a los visitantes, pero rápidamente igualó López, tras un grave error del arquero Marinelli, surgido en nuestra cantera. Sobre el cierre, un remate flojo de Cavallaro encontró a un Lux sin ningún tipo de reacción y cerró el 3-2 para Tigre.

No preocupó el nivel del equipo ni el resultado final, pero sí la floja actuación del arquero, que nunca mostró seguridad y tuvo responsabilidad en el último tanto. Habrá que esperar para ver quién ataja contra Alianza Lima, el rival que realmente importa.