"Vine a River para triunfar, no para estar en una camilla"
Marcelo Larrondo se lamentó por sus lesiones en River, se refirió a su presente futbolístico, y agradeció al plantel del Millonario por el apoyo recibido en el último tiempo.
Ezequiel Pirotti @tanopir
Larrondo llegó a River, no como una apuesta, sino como un hecho: el jugador venía de tener un nivel altísimo en Rosario Central. Pero su estadía en el Millonario fue bastante negativa: el delantero sufrió varias lesiones -muchas de ellas en sus rodillas- que lo único que hicieron fue marginarlo domingo tras domingo, e incluso de las pretemporadas. El mendocino rompió el silencio después de mucho tiempo.
"Vine a River para ganar campeonatos y hacer historia, para triunfar, no para estar en una camilla. Yo venía con una ilusión increíble y la verdad es que hasta el día de hoy lo pienso y juro que es algo raro lo que me pasó, porque venía con tanto ilusión, con tantas ganas de poder demostrar, de darle todo a la gente y a la dirigencia que también se portó de maravilla. Todavía tengo la espina clavada", expresó Larrondo en una entrevista con Clarín.
El jugador que arribó al Más Grande a mediados de 2016, y apenas jugó 460 minutos en dos años, no ocultó su fastidio por lo que le tocó atravesar: "A veces pienso en todo lo que me pasó, y es una pesadilla, no es creíble. Primero una rodilla, después la otra... Y me ponía a pensar y decía 'o es una cosa o es otra' o 'es mentira lo que está pasando'... Fue algo increíble porque estuvo en tantos equipos y nunca me pasó nada. La verdad es que puso muy mal. Trato de no mirar para atrás porque si no es peor. Ahora estoy más contento por que lo que más quería era entrenar con mis compañeros. Cuando estábamos en el gimnasio con ellos y nos poníamos a hablar yo ya me sentía parte del grupo, pero después cuando ellos se iban a hacer otros entrenamientos al campo de juego y yo me quedaba en el gimnasio me sentía muy mal".
Pero con la mira puesta en lo que viene, el Chelo se mostró positivo para, de una vez por todas, demostrar por qué la dirigencia de River lo trajo al club: "Ahora estoy más tranquilo. Dos meses antes del receso empecé a entrenar a la par de mis compañeros y estoy contento porque después de tanto tiempo inactivo pude terminar entrenando, pude jugar con la Reserva. Si miro hacia atrás y veo donde estoy parado ahora estoy muy contento y con muchísimas ganas de empezar a sumar minutos, que es lo que más quiero".
Por último, no dejó pasar la oportunidad para destacar a sus compañeros de equipo por el trato recibido en un momento complicado de su carrera: "Quiero agradecerle al cuerpo técnico y a los jugadores por el apoyo que me brindaron siempre. En River hay un grupo humano bárbaro. Hay mucha humildad. Cuando llegás te integran rapidísimo, te hacen sentir como si estuvieras hacie diez años en el club y eso lo ayuda a uno para estar bien y sentirse cómodo".