¡Mete presión! River ganó y se mete de lleno en la pelea del campeonato
River tenía que ganar para seguir ganando lugar en la pelea por el campeonato y lo consiguió sobre la hora visitando a Sarmiento.
Una nueva oportunidad para seguir achicando diferencia en la tabla de posiciones, River sabía que tenía que volver a sacar energías desde adentro y lo consiguió: sobre el final se trajo tres puntos importantísimos de Junín.
Con varias bajas entre lesionados y citados a fecha FIFA, Marcelo Gallardo dispuso un equipo bastante atípico compuesto por una defensa de tres centrales donde, en la actualidad, se desempeñan como mediocampistas.
Con los goles de Jorge Carrascal y Enzo Pérez sobre la hora, River se trajo una importante victoria por 2 a 1 ante Sarmiento que le permite meterse de lleno en la pelea del campeonato.
El partido comenzó de ida y vuelta, y con bastante espacio para los equipos en las transiciones rápidas. A los 12, el local se puso en ventaja con un insólito gol: Alanis remató mordido, Bologna se quedó parado pensando en que Enzo Pérez rechazaba y la pelota entró lentamente. En el minuto 34, Casco se mandó una gran jugada individual, se la soltó a Carrascal que sacó un zapatazo de una para igualar el marcador.
Para la segunda mitad, Salomoni haría su debut absoluto ingresando por Vigo. A los 10 minutos, Girotti tiró el centro y el árbitro no cobró un claro penal a Romero. En esa misma jugada, llegó el pase desde el otro lado, el propio Girotti le ganó a todos en la altura y se terminó luciendo el arquero para mantener el empate parcial.
El Más Grande siguió empujando para tratar de quebrar la igualdad e ingresarían Fontana, Rollheiser y Paradela por Carrascal, Girotti y Palavecino. Sobre el final, la pelota cayó al área nuevamente y, tras una serie de rebotes, Enzo Pérez empujó la pelota y le dio la victoria al Millonario.
Con estos tres puntos, River comienza a meter presión y se ubica tercero en la tabla de posiciones de manera momentánea hasta que juegue Estudiantes. Con 14 fechas por disputarse, los de Gallardo siguen dependiendo de sí mismo.