El capitán del Millonario reconoció que el error ante la Academia costó caro, pero se mostró confiado en el grupo y opinó sobre una posible final de Libertadores ante el máximo rival.

"River encontró una manera en la que cuando tiene exigencias de máximo nivel supo responder porque nos preparamos para eso". Leonardo Ponzio reconoce, aunque sin detallar la fórmula, la fortaleza que adquirió el Millo en los cruces mano a mano en los últimos años. En diálogo con Clarín, el capitán habló sobre la trasnformación que se generó con la llegada de Napoleón: "Lo que hemos logrado en estos años con Gallardo es querer dejar todo en la cancha para ser alguien en este club, porque representamos a mucha gente de este país. Tenemos el gran valor de respetar al grupo y a la institución. Y nos gusta competir siempre", subrayó.

En cunato al futuro del equipo en la soñada Libertadores, se animó a imaginar una final nunca antes vista: "Si River y Boca juegan la final de la Libertadores se para el mundo, no el país", reconoció.

También opinó sobre el caso Zuculini: "River estaba exento de todo eso porque lo que había que hacer con anterioridad, lo hizo. Después se armó un revuelo porque del otro lado su propia gente pedía que reaccionaran ante una situación así y eso hizo que se manifestaran de una forma que por ahí no es válida"., expresó el nacido en Las Rosas, Santa Fe.

Finalmente, hizo una autocrítica sobre su expulsión ante Racing e hizo hincapié en la fortaleza grupal: "A pesar de no haber podido jugar me sentí bien porque vi que estábamos bien representados. Mis compañeros estuvieron al nivel que había que estar. Fue algo incómodo también porque me hubiese gustado estar, pero me mandé yo la macana (sic) en una situación inconsciente, por cómo me tiré al piso cuando ya tenía amarilla. Pequé de inocente y me quedé afuera".