Hace años no se veía tanto fútbol en la Argentina: River bailó a Racing y le ganó 2-0 en un partido que pudo haber sido goleada.

Acá está River. El famoso. El verdadero. El del taco. El del lujo. El de la gambeta. El de los goles. El de Napoleón. El Millonario aplastó a Racing desde el juego y ganó 2-0 en un partido que pudo ser una goleada histórica.

El Millonario dominó a gusto desde el primer momento a la visita, que llegaba soñando con un triunfo que lo acercara al título. Con una defensa sólida y con un equipo que se sacrificó para recuperarla rápido, los del Muñeco marcaron el ritmo del partido.

Juanfer lució por primera vez la 10 en el Monumental y abrió el marcador con un tiro libre fantástico, que se clavó en el ángulo de Arias.

Ya en la segunda mitad, Casco marcó el segundo tras una jugada que pudo haber sido gol de Borré, quien tuvo varias para ampliar el marcador.

El 2-0 fue mentiroso. Pudieron haber sido 4, 5 o 10 goles que iba a estar bien.

Volvió River. Volvió el fútbol, el campeón de América. Ya lo sufrió Racing, que pase el que sigue.