Lucas Pratto quedó en libertad de acción luego de rescindir su contrato con River en el día de ayer y recordó lo que fue su mejor año en el club con la conquista de la Libertadores ante Boca.

Ayer por la tarde se confirmó la salida de Lucas Pratto de River tras llegar a un acuerdo y dejar parte de la deuda que mantenían con él. El atacante rompió el silencio y recordó la conquista en Madrid ante Boca y analizó el presente del Más Grande.

Cuando el Millonario afrontaba la semifinal de la Copa Libertadores y un Superclásico definitorio por el torneo local, el delantero pidió ser cedido al Feyenoord. La negociación fue a préstamo por seis meses sin cargo y sin opción.

"Si tengo que elegir un gol me quedo con el de la Bombonera, fue psicológico, sacando del medio. El Pity nunca iba para adelante, y esta vez lo hizo, salió Magallán, me había picado mal. Fui a festejar con Lux porque antes me había dicho que iba a meter un gol, por eso lo dejé medio colgado al Pity en el festejo", comenzó Pratto.

Siguiendo sobre el encuentro de ida por la final, agregó: "En el partido de ida Boca nos hizo dos goles en un tiempo y nosotros le habíamos creado seis o siete situaciones de gol. Lo mejor que hicimos entre las dos finales fue el primer tiempo en la Bombonera".

En diálogo con TyC Sports también recordó otro momento de la Libertadores de 2018: "Fue un partido muy especial contra Gremio, la chilena en el área, ¡ja!. No metí un gol pero sentí que di algo muy diferente. Tuve un partido espectacular y sentí que me había pasado algo que había sentido en otros clubes que antes no".

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En cuánto a la actualidad de la Copa, comentó: "River o Atlético quiero que lleguen a los cuartos, después que pase cualquiera" y agregó: "Mi corazón está hoy con Mineiro, porque jugué en ese club, le tengo gran aprecio y además juega uno de mis mejores amigos, que es Nacho".

Sobre el nivel del equipo de Marcelo Gallardo, señaló los comienzos de temporada: "Siempre nos costó en River salir de la pretemporada. A mí me pasó. Siempre decíamos que hasta el cuarto partido nos costaba. También es el conocimiento con los compañeros. Llegó Romero ahora, Fontana, Paradela y Palavecino llevan solo 6 meses".

Para cerrar, confesó que no volvería a Boca por su identificación por el Más Grande: "No hay chance. Salí de Boca, tengo buenos recuerdos, siempre fui agradecido por la formación que me dieron, pero no tuve oportunidades en Primera y me cruce con ciertos dirigentes de los que no me quedan buenos recuerdos".