El jugador surgido de las divisiones inferiores del club se consagró campeón de la Europa League tras vencer en la final al Inter por 3-2, luego de arrancar perdiendo a los cinco minutos del primer tiempo.

Con una gran temporada de Lucas Ocampos, el Sevilla consiguió la copa por sexta vez en su historia. El atacante jugó de arranque pero por cuestiones físicas tuvo que abandonar la cancha a los 25 minutos del segundo tiempo.

El jugador llegó al conjunto español desde el Olympique de Marseille por 15 millones de euros y en la primer temporada convirtió 17 goles, repartió 5 asistencias en 44 partidos jugados, siendo la figura del equipo.

En un partido sumamente apasionante el conjunto sevillano arrancó perdiendo el partido a los cinco minutos. Luego se pudo poner en ventaja 2-1, pero el empate del Inter llegó rápidamente. La ventaja final fue con un gol en contra del delantero Lukaku, minutos después de la salida de Ocampos.

Cabe recordar que el delantero fue clave en los cuartos de final contra el Wolverhampton convirtiendo el gol decisivo a los 87 minutos de cabeza. En este mismo encuentro se produjo su problema en una de sus rodillas, que le hizo salir de forma temprana en los últimos dos partidos de la competencia.

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De las seis finales que disputó, el Sevilla levantó siempre el trofeo. Además es el máximo ganador de la Europa League con la particularidad que es el único que la pudo conseguir tres veces consecutivas, fue en las temporadas 13-14, 14-15 y 15-16.