David Trezeguet se ganó el corazón de los hinchas de River al llegar en el peor momento de su historia y recordó lo vivido como jugador del Más Grande.

River tocó fondo y entre los jugadores que resignaron todo para ponerse la camiseta aparece David Trezeguet. El campeón del mundo con Francia recordó lo que vivió en el Millonario, confesó que le hubiera gustado tener otro final y remarcó que no se siente referente.

En diciembre de 2011 dejó los millones de Dubái y vino a ayudar al club. Con sus goles y presencia ayudó a que el Más Grande vuelva a su lugar de pertenencia y por eso los hinchas siempre le van a estar agradecido.

"Lo viví como una experiencia de vida con 34 años. Buscaba divertirme en la cancha, conocer al hincha y al fútbol argentino. En muy poco tiempo el mundo River me adoptó, era una situación en la que no había esa disponibilidad para querer volver. Esto me facilito para que Almeyda me abra las puertas", comenzó Trezeguet.

En diálogo con Halcones y Palomas, agregó: "Estuve presente en el partido con Belgrano como hincha, vi la frustración total del mundo riverplatense. Ese había sido mi última imagen en River. Cuando volví me encontré en esa dinámica de sufrimiento, donde estábamos más cercano al hincha, con las filiales, escuchábamos el pedido de volver. Era una presión justa para River, el foco era muy importante, las últimas semanas nos aislamos, nos fuimos a las afueras de Buenos Aires para dejar un poco de lado esa presión".

Además el ex delantero remarcó que no se siente ídolo del club: "Si me lo preguntas, no me siento ni referente ni ídolo. Esto se construye con el tiempo, como lo que viví en la Juventus. En ese momento, River necesitaba ídolos, estaba la búsqueda de una claridad y disponiblidad que no había en lo interno y externo del club. Yo no soy más que un hincha más de River, que vine en un momento crítico para aportar desde lo que me importaba a mí que era el fútbol. Las cosas se dieron de manera positiva".

"En el partido con Almirante sentías esa misma temperatura que tenía contra Belgrano en la tribuna: ese temor, miedo de no poder ascender. Hasta esa última fecha eramos varios los que nos jugábamos. Se ve en las imágenes, para la gente fue un desahogo de no querer vivir más esa situación y, por suerte, River después un futuro alentador, eso es lo más importante", confesó.

Para cerrar, admitió que le hubiera gustado otro final con la banda puesta: "Mi idea cuando llegue a River era terminarla. En lo deportivo, por diferentes situaciones, tanto Ramón como Marcelo optaron por diferentes situaciones. Uno como profesional tiene que aceptar, me hubiera gustado terminar con un adiós diferente al mundo River. Creo mucho en el destino, la situación se dio de esa manera y no hay ningún tipo de rencor. Viví y disfruté mi momento".