Almeyda motorizado
La mochila que cargaba sobre la espalda tenía el escudo de River. Habían pasado pocos minutos de las 18 cuando Matías Almeyda salió por una puerta lateral de la concentración y, tras darle una entrevista a un canal deportivo, se puso un casco. Es que en vez de irse en uno de los automóviles que colecciona, el Pelado optó por una moto.
Con zapatillas blancas, jean azul y una remera negra, Almeyda se subió a la moto, bromeó con los periodistas y, ante las cámaras de dos fotógrafos, expresó: "No me saquen fotos ahora, háganlo cuando sea la caída". Lo cierto es que en su época como jugador no podía viajar sobre dos ruedas, por eso ahora aprovecha para darse el gusto, teniendo en cuenta que vive cerca.
El gusto del DT por los motores no sólo se vio reflejado con la moto, sino que también dejó estacionado su Renault Gordini -una auténtica reliquia- y, en otras oportunidades, otro automóvil descapotable. De esa manera, quedó demostrado que además de la pasión que tiene por el fútbol, Almeyda colecciona vehículos y siente identificación con los fierros.