River hizo valer su peso ofensivo y sacó pasaje a los octavos de final con un 3-1 sobre Villa Dálmine. Pity Martínez, Nacho Fernández y Pratto, con un golazo, le dieron la victoria al equipo de Gallardo.
Después de la goleada a Central Norte, River volvió a cumplir con las expectativas y sacó pasaje para los 8vos de final de la Copa que sueña con ganar una vez más. El campeón se impuso ante Villa Dálmine, aunque tuvo un primer tiempo discreto, en el que le costó hacer valer su diferencia de jerarquía. El equipo de Gallardo abrió el marcador con el penal que ejecutó Gonzalo Martinez y no mostró mucho más en una primera mitad en la que el equipo de Campana se lanzó a buscar el encuentro.
En la segunda mitad, con Nacho Fernández y un golazo de Pratto, empezó a inclinar la balanza y quebrar la moral de los dirigidos por De la Riva, que sin embargo llegaron al descuento sobre el final por intermedio de Martinich, que a pesar del esfuerzo de Armani, quien volvió en plenitud con atajadas fundamentales en la primera mitad y el complemento, convirtió el gol del honor.
El rendimiento alcanzó para prepararse de cara a lo que viene: el objetivo de seguir avanzando en una competición que puede meterlo en la próxima Libertadores, la serie de la edición actual ante Racing y el comienzo de la Superliga, uno de las pocas deudas del ciclo de Napoleón.