River no aprovechó el tropezón de Boca y empató sin goles con Rosario Central. Otra vez a depender de ellos…
Se perdió una chance inmejorable: si River ganaba, quedaba a un triunfo del liderato del campeonato. Sin embargo, no pasó del cero contra Rosario Central y quedó nuevamente a la espera de lo que pueda hacer Boca.
El partido del Millonario fue muy malo. Sin ideas, con un Canalla que apretó arriba y le complicó la vida al equipo de Gallardo.
Con un Pinola brillante y un Musto cada vez más sólido, la visita expuso las falta de movilidad del local, que quedó muy lejos del nivel que venía mostrando.
Recién en la segunda parte se contabilizaron las primeras chances de peligro de River: un remate en el palo de Driussi y una atajada bárbara del Ruso Rodríguez a Alario fueron las escasas posibilidades de gol de los de Gallardo.
Ahora, el Millonario deberá ganar en Tucumán para seguir prendido. Encima, sin Maidana: llegó a la quinta amarilla y cumplirá en el norte del país.
Cada vez más complicado…