Nelson Cuevas recibió en su casa a Marcelo Gallardo y cuerpo técnico, con un asado y una guitarreada, antes de que el entrenador regrese de Paraguay.
“Hacelo Cuevas, hacelo, te lo pido, hacelo, por el amor de Dios”, dijo alguna vez Atilio Costa Febre, cuando Pipino se iba a solo al gol que convirtió frente a Racing, para darle la victoria al conjunto Millonario. Claro está: el gol lo hizo. Pero también se encargó de hacer el asado para agasajar a Gallardo y compañía.
Recordemos que el Muñeco estuvo este último fin de semana en Paraguay, para ver algunos jugadores de cara al próximo mercado de pases de River. El entrenador aprovechó los días libres y, no sólo asistió a estadios, sino que también visitó a Cuevas, en su casa de Asunción.